• “Tusorio”: cuando un niño ha alcanzado generalmente los tres años, los padres buscan un familiar o amigo para que realice el tusorio o el primer corte de pelo, se acostumbraba a que cada invitado cortaba la “jimba” (trenza) del niño y por ella depositaba una cantidad de dinero, los gastos de la fiesta corrían por parte de los padres del niño y el Padrino tenía que dejar cierta cantidad económica de dinero a su ahijado(a). El origen de esta costumbre se halla en un versículo del Deuteronomio que compara al hombre con un árbol, así como las frutas de árboles nuevos, de acuerdo con la ley sagrada, no pueden ser cosechados durante los tres primeros años de floración, tampoco puede cortarse el pelo a los niños pequeños, en especial varones, durante los tres primeros años de vida. En Medio Oriente, en Meron se llama jalaká (o corte de pelo), en el Imperio Inca se llamaba El rutuchiku, y en Fundochamba se llama Tusorio, aunque en la actualidad se está perdiendo. Este acontecimiento es una fiesta especial en donde los padres invitan también a los vecinos, en la noche los padres le hacen a su hijo infinidad de trenzas en todo el cabello y de igual manera preparan el estofado de gallina criolla y el sabroso guarapo fermentado de unos 15 días o la tradicional “Huanchaca”. El en Día de la Tuza, el padrino que ha sido escogido para que realice el corte de la primera trenza, se acerca y presenta un regalo al niño, luego le corta una trenza y se toma un vaso de trago o “punta” (trago de caña), luego hacen lo mismo los invitados, debiendo dejar un regalo. Más tarde se enciende la fiesta con el baile y la buena comida.

 

  • Tejido de jergas, alforjas-bolsico con hilo de lana de borrego: la jerga (pieza tejida con hilo de borrego) sirve para colocarla sobre las sillas para que descansen las personas que llegan de visita a casa. Una vez seleccionada la lana de borrego se la coloca sobre un madero (huango) y se la sujeta con el mismo hilo, luego se abre la lana hasta formar una que otra hebra. Un madero de 20 a 25 centímetros de largo y una cáscara de naranja colocada en uno de los extremos (antes usaban un pedazo de hueso llamado tortero) forma el USO, en esta pieza se enredan las hebras de hilo que se desprenden del guango. Los movimientos rotatorios del uso hacen que poco a poco se vaya formando el hilo. Los familiares ayudan a construir el telar rudimentario, se usa sogas, cabuyas, palos. Una cinta elaborada en el mismo telar es usada en la cintura de la persona y así templar los hilos que se tejen. Luego se la amarra a un madero especial en el cual se colocaran los hilos para empezar a tejer. La CALLHUA es una tira de madera que se coloca en medio del tejido y sirve para con golpes dirigidos hacia el cuerpo de la persona apretar poco a poco cada uno de los hilos que se cruzan. Entre movimientos y apretones aparece un nuevo objeto, una jerga, una alforja (bolsico). La alforja es uno de los símbolos de la identidad Lojana, una herencia de los indígenas Paltas y un complemento obligado en la zona rural. Está confeccionada de forma manual con una tela, que mide un metro de largo y tiene forma rectangular. Cuenta con dos bolsillos grandes para colocar variados artículos para viajar grandes distancias. Las alforjas pueden ser personales y tienen una capacidad de 20 libras. Las más grandes sirven para llevar hasta dos quintales y son colocadas en el lomo de un caballo o burro. Complemento obligado aún en la zona rural, la alforja es una pieza rectangular de variados colores y diferentes decoraciones, listas, cuadros, rombos y demás cenefas geométricas, cuyos extremos están doblados formando dos bolsillos. Se utilizan como bolsas o receptáculo para pequeños objetos, para comida y otros usos. Puestas sobre los hombros se dobla por la mitad dejando caer un bolsillo para adelante y otro hacia atrás. Confeccionadas en distintos materiales se encuentran en diferentes variedades de lana, hilo, sarga, paño, etc. Se confecciona para hombres y mujeres y también para la carga sobre los animales.

 

  • Baile de los angelitos: ya casi extinguida en la parroquia. Cuando un niño no mayor de siete años fallece por cualquier causa, sus padres o familiares lo visten de blanco y lo colocan en un féretro de color blanco adornado con encajes telas y flores. En horas de la noche, uno a uno de los invitados llegan a participar del acompañamiento del difunto, unos llevan pan, arroz, yucas y gallinas para entregarlos a los dueños de casa y otros botellas de trago o punta para compartir con los asistentes. La gente una vez reunida y después de rezar el rosario comenta de las características del fallecido y al calor de los tragos, la gente empieza a bailar en homenaje al niño fallecido, en señal de alegría porque está gozando de la gloria de Dios por haber muerto sin pecado mortal.

 

  • Velorio de los difuntos: cuando fallece una persona, se realiza el velorio que consiste en velarlo con cirios toda la noche y rezar varias veces el rosario. Las personas que llegan a acompañar, a veces llevan alimentos (fideos, yuca gallina, arroz, pan, etc.). Después del entierro los familiares invitan a las personas presentes a una comida (almuerzo o merienda) como muestra de gratitud y en algunos casos se quedan tomando unos tragos. En esta comida sobresale la abundancia en el plato, seco de gallina, seco de chancho acompañado de yuca, camote arroz ensaladas, seco de carne res, en fin es un plato bien puesto que por costumbre, lo que no avanzan a comer lo llevan en funda a sus casas para dar a familiares o calentarlo en el desayuno (el tradicional «calentado»). Al siguiente día del entierro realiza una novena de nueve días, en cuya novena asisten los moradores del barrio, en ella se reza el rosario y se le pide a Dios por el alma del difunto y todas las noches los familiares del fallecido dan café con pan, con humas, empanadas a toda la gente que asiste a la novena.

 

  • Lavatorios: cuando una persona adulta fallece se la traslada al cementerio para sepultarla, los asistentes oran hasta que cubren de tierra el féretro y luego son invitados a un almuerzo en muestra de agradecimiento. Horas más tarde o al siguiente día, los familiares recogen la ropa del fallecido, sábanas, cobijas y prendas de vestir; estas se trasladan al río, quebrada o posa más cercana a realizar el lavatorio de la ropa. Esta tradición de lavar la ropa es con la finalidad de eliminar las enfermedades y luego repartir a familiares.

 

  • Minkas o mingas: desde la colonia se mantiene el espíritu de colaboración. Las mingas es una muestra de integración, solidaridad y participación para un bien común, la carretera que une a Fundochamba con Quilanga fue trazada y hecha a base de mingas a igual que los caminos ancestrales del sector rural. Es una actividad en la que participan los moradores de un barrio, los padres de familia de una escuela, los integrantes de una institución, para realizar un trabajo en el que cada persona da su fuerza de trabajo. Cuando se hacen mingas mientras los hombres dan su fuerza de trabajo, las mujeres participan haciendo la comida comunitaria para los trabajadores y se da, de vez en cuando, la chicha, el guarapo fermentado para refrescar y dar calorías.

 

  • Fiesta de las cruces: la celebración de la fiesta de la santa cruz se realiza cada 3 de mayo, la cual consiste en adornar la cruz existentes en los barrios de Fundochamba, Libertad y Sauce y concentrarse toda la población, celebrar misa, rezar el santo rosario y tomar unos tragos de aguardiente.

 

  • Matrimonios: cuando alguna persona contrae matrimonio con otra, los padres de la novia acostumbran a ofrecer una fiesta de recepción en su casa a los novios, padrinos, testigos, familiares y amigos. La fiesta inicia con el traslado de la novia desde su casa a la iglesia de Quilanga, en unos casos lo hacen a caballo y si hay recursos en carro. Una vez terminada la ceremonia la gente se apresura a salir de la iglesia y ubicarse en la puerta, para cuando salgan los novios poder lanzar arroz como una manifestación de los deseos de prosperidad y amor eterno. Los primeros en llegar a la casa de la novia son los padres, padrinos, familiares y amigos quienes se ubican a la llegada de la casa para esperar a los novios. A la entrada de la casa y bien adornados están algunos arcos elaborados con guadua o carrizo revestidos de telas blancas y adornados con frutas nativas del lugar. Cuando llegan los nuevos esposos al lugar de la fiesta, al pasar por el arco pasan cogiendo las frutas de su preferencia y luego ingresan todos los invitados y se ubican en un lugar preferido para participar de la programación. Al poco rato los novios sirven guarapo u otro licor para compartirlo con los presentes. Durante toda la noche los esposos y familiares se esmeran en prestar atención a los padrinos como muestra de gratitud por compartir estos momentos especiales en su vida. Seguidamente los padres del novio o novia realizan el brindis de una copa de champagne, luego la cena (plato especial) y en la segunda parte la intervención artística y luego continúa el baile hasta el amanecer.

 

  • Hornos de tierra: los hornos de tierra son elaborados ya sea escavando en alguna loma o también elaborándolos con una tierra arcillosa mezclada con paja y ladrillo. Un horno de tierra es elaborado poniendo un ladrillo sobre otro y para fusionar un ladrillo con otro se utiliza la tierra arcillosa mezclada con paja y para que sea pegajosa le añadimos agua, para dar forma a la parte superior del horno se recurre a la tierra arcillosa y a la punta se deja un agujero y también a la parte de la mitad se deja una como puerta. Estos hornos son usados aun para la elaboración de los exquisitos bizcochuelos de chuno, las tortillas de maíz, el pan de suelo, para hornados de gallina criolla o de chancho.

 

  • Enteje: empieza en horas tempranas del día, llegan vecinos familiares y un maestro para colaborar en la colocación de las tejas de una nueva casa o reposición del tumbado de casa construida. La mano de obra no es pagada, es voluntaria mediante la minga. Una vez colocados los carrizos amarrados con cabuya se inicia la colocación de las tejas para fijarlas unas con otras, para que no se muevan con el viento son unidas con una mezcla de barro y paja seca, así se evita que cuando llueva pueda pasar el agua. Una vez terminada la jornada de la colocación de la teja, los dueños de la casa ofrecen la «comelona» compuesta de seco de res, de chancho, de chivo y, si hay recursos, de gallina criolla y finalmente es el baile y acompañado del licor del lugar.

 

  • Bazar: es una actividad que se conserva y se relaciona con la fiesta de algún patrono de los barrios, sean santos, niño Jesús o Vírgenes. El bazar se realiza en el día de la fiesta luego de haber participado de la Santa Misa, todos los asistentes salen al exterior de la iglesia, unos aprovechan para ir a las tiendas, los niños a la compra de helados y otros se acercan a participar del Bazar. Se escuchan gritos promocionando lo que se vende, los hace la persona encargada de anunciar la venta de los productos locales que son obsequiados por diferentes priostes y moradores de cada barrio. Finalmente una vez vendido todo reúnen el dinero y es asignado para mejoras del templo o para apoyar al sacerdote.

 

  • Fiestas de “Santa Marianita de Jesús, Dolorosa, Virgen de Fátima, Divino Niño, Cristo Pobre”: estas fiestas dura dos días. En el primer día, a las 19:00 de la noche se realiza la celebración de la santa misa de vísperas, luego se presenta disfrazan, dicen coplas, adivinanzas, refranes, cantan, hacen teatro también bailes, sainetes, luego se quema el castillo, juegan la vaca loca y juegos pirotécnicos y ser sirve el calentado. Al siguiente día se realizan los juegos de fútbol masculino y femenino, voleybol se entrega una copa al equipo ganador. Por la tarde se celebra la Santa Misa y el Bazar.

 

  • Pela de chancho: las personas dueñas del chancho se levantan como a las 4:00 o 5:00 de la mañana para hacer la pela del chancho: primero se lo mata se recoge la sangre en un recipiente con sal. Se hace una fogata con leña de faique, café, guabo y sobre tablas o en tendal cemento se coloca el chancho para chamuscarlo con llashipa o con fuego doméstico con un soplet, se lo raspa con un cuchillo fino y luego se lo lava, esto se lo hace hasta que el cuerpo quede dorado. Con suma destreza el pelador parte el chancho a lo largo del pecho para poder extraer el menudo y las vísceras. Se abre el hocico del chancho y se lo amarra con una soga, luego se lo levanta para colgarlo en una viga o gradas de la casa, se lo lava con abundante agua y listo para cortar. A la altura del cuello se hace un corte circular en el cuero y desde aquí se hacen cortes verticales hasta llegar a la cadera, estos cortes tienen un ancho no mayor de dos dedos y las tiras que salen son libres de grasa. Sin perder tiempo los invitados cogen estas tiras de cuero crudo les ponen un poco de sal y acompañados de mote disfrutan de su sabor, otros prefieren asarlos en las brasas de la leña o freírlos. El pelador separa la grasa y la coloca en un recipiente para que otra persona la corte en cuadros para luego freírla y obtener los chicharrones. La carne es despostada, las costillas son cortadas y puestas en una paila para obtener la fritada y junto a ella también se ponen a freír camotes y plátanos maduros. Lo último que queda en la cuerda es la cabeza llamada “tutuma”, se saca el cuero de la cabeza entero (Carola) y se lo pone a secar para hacer un buen sancocho. La persona que baja la cabeza es la encargada de ofrecer a los visitantes una botella de trago o jaba de cerveza. Una vez que han lavado el menudo se procede hacer las morcillas o morenas y las longanizas. Al momento del almuerzo se brinda a los presentes un plato de repe blanco o arvejas con guineo y un plato de mote con plátano maduro frito, camote, ensalada y una buena porción de chicharrones con fritada. Por la tarde se sirve la chanfaina. Durante lo que dura la pela de chancho se brinda a los presentes una copa de trago o punta, cerveza, caramelos y finalmente cada uno se retira a su casa con su buena porción de comida.

 

  • Lidia de Gallos: cada aficionado después de haber entrenado a cada ejemplar llega a la cancha y con mucha concentración pesa su gallo, luego lo cotejan (comparan el tamaño y estructura muscular), y una vez decidida la pelea, se calzan los gallos (colocan las espuelas) y se pone los gallos al centro de la cancha, se activa el reloj y el juez de gallos da inicio a la pelea. Los participantes realizan sus apuestas haciendo “vaca” hasta el valor que se pacta por pelea. Durante la pelea se escuchan gritos tanto de hombres como de mujeres avivando a los gallos. Durante el juego la gente toma licor, juega la baraja o casino.

 

  • Domingo de ramos: es un día en donde los católicos se reúnen para recordar la caminata de Jesús. Para este acontecimiento las personas adquieren las «PALMAS», plantas que con tiempo las buscan en el piso alto (cerro) de la parroquia. Una vez bendecidas las palmeras el día de ramos son guardadas para quemarlas cuando se produzcan tempestades, plagas o cualquier mal. Esta práctica ha ocasionado paulatinamente la desaparición de esta planta, por lo que en la actualidad se está orientando a la comunidad para que no las compre y opte por otras medidas alternativas para reemplazo de las palmas.

Otras Festividades.

En las fiestas se organizan campeonatos de Ecuavoley e Indor. En las de Parroquialización, se elige la Reina de la parroquia; en el mes de Mayo se elige a la Madre Símbolo.

De manera tradicional se celebra el Carnaval, Semana Santa, Día de las Cruces, Difuntos, el Pase del Niño, Año Viejo, Año Nuevo. Una fecha que ha sido incorporada en años recientes es la celebración del Día del Árbol, el 22 de mayo.

Como observamos en la parroquia se realizan distintos actos recreativos, culturales, sociales, deportivos y religiosos. Junto a las celebraciones indicadas, en la parroquia se practica un sin número de juegos tradicionales tanto para niños como para adultos.

Los niños y niñas, en sus ratos de ocio, se dedican al juego de las bolas. Los jóvenes y adultos juegan casino, indor fútbol, Ecuavoley. Es importante señalar que los jóvenes se trasladan a participar en jornadas deportivas fuera de la parroquia e incluso del cantón, momentos que los consideran importantes para intercambio social.